
Opinión
Jorge D’Onofrio, exministro de Transporte bonaerense, eliminó sus cuentas de Instagram y X (exTwitter) en medio de un escándalo de corrupción que lo vincula con presuntas irregularidades en la VTV, lavado de dinero y favores a empresas amigas.
Durante las últimas horas, el exministro de Transporte bonaerense, Jorge D’Onofrio, eliminó sus cuentas de Instagram y Twitter (@donofriojorge) tras verse envuelto en una ola de denuncias y allanamientos relacionados con presuntas irregularidades en la eliminación de fotomultas y la contratación de empresas amigas en el marco de la Verificación Técnica Vehicular (VTV). La decisión de desaparecer de las redes sociales tendría que ver con eliminar evidencia de relevancia que podría exponerlo ante las causas judiciales que mantiene en su contra.
La iniciativa del exministro de Axel Kicillof coincide con el reciente allanamiento de una financiera en el Sheraton Pilar, vinculada a D’Onofrio y su entorno cercano, ordenado por el juzgado Federal de Campana, liderado por Adrián González Charvay. En el operativo, se hallaron documentos que podrían probar maniobras de lavado de dinero. Entre los implicados en la causa también figura Claudia Pombo, vinculada sentimentalmente al exfuncionario y expresidenta del Concejo Deliberante de Pilar, destituida tras la explosión del escándalo.
Según la denuncia, presentada inicialmente por Leandro Camani y luego complementada por Matías Yofé, presidente de la Coalición Cívica de Pilar, D’Onofrio habría favorecido a múltiples empresas con las que tiene lazos directos, incluida la empresa Solutiontec, encargada de la gestión de turnos para la VTV, cuyo director mantiene vínculos con Token Capital, la financiera allanada. Este caso no solo salpica a D’Onofrio, sino que también expone un entramado de corrupción que incluye negocios no declarados y posibles coimas para reducir o eliminar infracciones de tránsito.
El exministro presentó su renuncia en diciembre pasado, apenas semanas después de que se iniciara la investigación. Ahora, su desaparición de Twitter e Instagram añade un nuevo capítulo a la trama, que involucra a barras de fútbol, sociedades offshore y una creciente presión judicial.
¿Qué es lo que preocupa a D’Onofrio de su rastro virtual? (www.REALPOLITIK.com.ar)
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