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El excampeón mundial de boxeo, Jorge "Roña" Castro, dialogó con RADIO REALPOLITIK FM (www.realpolitik.fm) sobre su carrera deportiva, su icónica victoria ante John David Jackson y su compromiso social en la actualidad.
"Yo me consideraba un gran pegador y lo fui porque llegué a ser campeón del mundo", afirmó Jorge "Roña" Castro al recordar su trayectoria en el boxeo. Con una carrera llena de logros, el santacruceño alcanzó todos los títulos posibles: "Fui campeón argentino, sudamericano y después del mundo, lo más grande".
Entre sus peleas memorables, destacó su recordada victoria contra John David Jackson en 1994, cuando logró noquear a su rival tras estar al borde de la derrota: "No me quiero ni acordar porque me duele. Me pegó justo en la pera y me hizo tambalear. Sentí las cuerdas contra mi espalda y empecé a bloquear los golpes. Le tiré un golpe con la izquierda y vi que se le dieron vuelta los ojos como si fuera un cieguito". A pesar de que Jackson intentó reincorporarse, "ya estaba liquidado". La pelea se convirtió en un clásico del boxeo mundial: "Se repite en Instagram, en YouTube, en Facebook, quedó grabada en la retina de todos".
Castro también habló sobre su compromiso con la comunidad y el trabajo solidario que lleva adelante en la actualidad. "Durante la pandemia compré un gimnasio, pero no podíamos abrir. Empezamos a dar de comer y con el tiempo pusimos un comedor. Hoy tenemos catorce comedores y nueve merenderos", explicó. Gracias a su reconocimiento público, logra conseguir alimentos para quienes más lo necesitan: "Voy a la fábrica y pido mercadería, y la gente me da. A donde voy, el 'Roña' tiene paso".
El ex boxeador aclaró que su trabajo no tiene fines políticos: "No quiero ser político ni nada. Prefiero remarla de abajo y llegar a donde estoy llegando". En su rol como funcionario de la provincia de Buenos Aires, desde el área de Desarrollo y Deporte, continúa con su labor social: "Repartimos alimentos lunes, miércoles y viernes a los comedores; martes y jueves a los merenderos. Gracias a Dios, al menos logramos que un pibe pueda irse a dormir con la panza llena".
Finalmente, destacó su labor con los jóvenes a través del deporte: "Tengo más de cien pibes en mi gimnasio. El boxeo te saca de todo, pero también les enseño que es un deporte para pegar y no dejarse pegar". Sobre su relación actual con la disciplina, bromeó: "Ya no me pongo los guantes ni para el frío". (www.REALPOLITIK.com.ar)
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