Tensión entre Soyem y Bariloche: Denuncias cruzadas reavivan el debate

El conflicto entre el Sindicato de Obreros y Empleados Municipales (Soyem) y la gestión del intendente Walter Cortés sumó un nuevo capítulo de confrontación, con denuncias cruzadas y un fuerte debate sobre la representación sindical y el uso de los fondos municipales.

Desde el gremio denunciaron una “grave embestida contra la libertad sindical”, luego de que Cortés presentara una demanda por consignación salarial contra la Comisión Directiva y una denuncia penal contra la secretaria general del Soyem, Brenda Morales, basada en acusaciones de amenazas e incumplimiento de deberes.

Para el sindicato, estas acciones constituyen un intento de criminalizar la protesta social y amedrentar a sus dirigentes, reteniendo sus salarios como una estrategia para debilitar la organización. En respuesta, realizaron una conferencia de prensa y una transmisión en vivo para denunciar públicamente el accionar del intendente.

El reclamo sindical: “El municipio persigue trabajadores en lugar de gestionar”

Desde el Soyem sostienen que el intendente debería enfocarse en resolver problemas urgentes de la ciudad, en vez de atacar a la dirigencia sindical. Entre los principales reclamos, mencionan:

• Falta de gestión en el vertedero.
• Crisis habitacional sin respuestas.
• Deficiencias en el transporte público.
• Obras viales incumplidas.
• Centros infantiles cerrados hace más de un año.
• Aumento del personal político mientras no se cubren vacantes en planta.
• Mejora de las condiciones laborales municipales.
• Falta de avances en el comedor comunitario La Covacha, incendiado hace cinco meses.

El municipio responde: “Soyem impide la gestión y defiende privilegios”

Por su parte, Martín Domínguez, apoderado de Walter Cortés, desmintió las acusaciones y aseguró que el gremio busca obstaculizar la gestión en vez de contribuir al bienestar de la ciudad. Según Domínguez, desde el inicio del gobierno de Cortés, el Soyem judicializó todo vínculo con el Ejecutivo, evitando el diálogo y exigiendo:

• Salarios para los dirigentes gremiales.
• Acuerdos paritarios por encima de la inflación.
• Licencias sin control.
• Asambleas sin previo aviso en horarios laborales.

Domínguez defendió la posición del municipio, afirmando que el Ejecutivo vela por el erario público y busca un diálogo abierto para las paritarias. Además, acusó al gremio de anteponer sus intereses particulares a los del conjunto de trabajadores municipales.

Un conflicto que crece sin resolución a la vista

Mientras el municipio y el gremio continúan con acusaciones mutuas, el conflicto deja en evidencia una falta de consenso y diálogo, lo que podría afectar aún más la operatividad municipal y los servicios en la ciudad. Con las paritarias en el horizonte, el enfrentamiento entre ambas partes parece lejos de encontrar una solución. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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