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15 de febrero de 2025 | Pelota dividida

“Nos entregaron un club endeudado”

Román Riquelme marca el discurso de Boca Juniors en un año caliente y le moja la oreja a Mauricio Macri

Mientras el Xeneize se prepara para el repechaje a la Copa Libertadores 2025, la gestión Román Riquelme encara su cruzada de fuego ante el macrismo en pleno año electoral con una entrevista picante. 

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por:
Juan Provéndola

En pocos días, el Club Atlético Boca Juniors jugará un cartucho fuerte: deberá definir ante Club Alianza Lima de Perú su clasificación a la Libertadores 2025. A pesar de haber sido finalista en el ’23, el Xeneixe no logró acceder a la copa del año siguiente, por lo que ya acumula un turno sin participar. Una segunda eliminación consecutiva (algo que no sucede desde hace dos décadas) sería, sin dudas, un sacudón para la gestión de RománRiquelme, que deberá afrontar el asedio de sus detractores durante los diez meses restantes de un año intenso también en lo político. 

Desde la vereda de enfrente, Mauricio Macri atiende distintas partidas adversas: además de la pulseada con Román, atraviesa un momento crítico en su rol de consorte de Javier Milei. Ambos frentes se le presentan hoy desfavorables, aunque el que más le duela probablemente sea el de Boca, sobre todo después de poner su nombre y su cara en una fórmula que perdió por goleada ante la que encabezó Riquelme. Fue en diciembre de 2023: 30 mil votos contra 16 mil. 

En sus crónicas del costumbrismo político, Jorge Asís denominó a Macri como El Ángel Exterminador. Un tipo que se fagocitó todo intento de disputa de poder dentro del Pro. Y que también busca asfixiar a otro tipo de contendientes: a Cristina Fernández de Kirchner la azota desde el partido judicial, a Milei lo corre con la carpeta, a Patricia Bullrich la disciplina. Con Riquelme, sin embargo, aún no pudo.

Los tiempos de la historia darán su veredicto final, pero lo cierto es que Román fue muy sagaz en su ingreso a la política de Boca, territorio de largo dominio macrista. La mejor negociación política del 2019 la firmó él: se apuntó, a último momento, al principal prospecto opositor al candidato de Mauricio, una jugada que descolocó al propio Ángel y, finalmente, le hizo morder el polvo en las elecciones que el club tuvo en aquel diciembre, cuando la fórmula Jorge Ameal - Mario Pergolini superó a la de Christian Gribaudo y Juan Carlos Crespi. Las efemérides deberán recordar que en ese mismo mes, y con pocos días de diferencia, Macri entregó las llaves de la Casa Rosada y de La Bombonera. 

Mauricio Macri logró reinventarse dentro de la política vernácula, lo cuál parecía más difícil. Pero, al mismo tiempo, Boca se le vuelve una referencia hostil, cada vez más adversa. De todas sus obras o intervenciones, probablemente Boca sea la que sienta más propia, más personal. Sin embargo, Riquelme lo empujó a un rol que Mauricio nunca contemplaba: pasar de banca a punto. La situación se agudizó en 2023, con la reelección de Román, esta vez encima ante una boleta que incluía el nombre de su némesis. 

Como le pasa con Milei, Macri también va de punto ante la banca de Riquelme, el dueño del casino. Quien, como tal, dispone del mazo en un año intenso para Boca: en junio tiene el mundial de clubes, otra lupa que amplificará lo bueno o lo malo, según quien nos lo quiera contar después. 

Como Mauricio, Román también busca una gestión “de autor”, aquella que con el tiempo sea recordada tan solo invocando su nombre. Desde los resultados deportivos, al menos por el momento, la diferencia es grande. Riquelme, entonces, encara con atrevimiento por otro lado: el económico. “El año pasado presentamos el superávit más grande de la historia de nuestro club”, contó el presidente en una reciente entrevista. 

Riquelme no dice esto en cualquiera momento: lo hace concediendo un mano a mano en vivo a la señal TNT el jueves por la noche, un día antes de que Boca enfrentara a Club Atlético Banfield, pero especialmente en la previa del decisivo cruce con Alianza Lima por la repesca de la Libertadores 2025. El calendario, estrecho, también se robustece con el mundial del clubes, que en junio opondrá al Xeneixe con el Sport Lisboa e Benfica y el Bayern de Múnich en Miami. 

En un momento caliente, Román toma el micrófono y marca agenda. La entrevista dura 22 minutos y en los primeros veinte habla de fútbol, el equipo, las incorporaciones, los desafíos deportivos. Y se guarda los últimos dos minutos para plantar bandera: “Estar acá es maravilloso. Esta es mi casa. Y la cuido como tal. Cuando llegamos, en el 2019, nos entregaron el club con deuda”. 

“Yo digo una cosa medio simple para mí: si tengo deudas y cinco personas en mi casa, compro un paquete de arroz y comemos eso; no voy a comprar 30 kilos de asado, porque me voy a endeudar cada vez más”, introdujo Riquelme. Así, explicó una gestión en la que se propuso “no fundir el club” y recordó que “en el medio de eso pasamos una pandemia, que todos nos olvidamos”. 

Valoró el mercado de pases y destacó a Carlos Palacios, Alan Velasco y Ander Herrera. “Si hoy podemos traer esa cantidad de jugadores, es porque podemos cumplirle”, avanzó Román. Y definió: “Yo estudié hasta séptimo grado, hubiese querido estudiar más, pero después escucho a la gente que está preparada, a los intelectuales estos que dan consejos todo el tiempo, que estuvieron treinta años en nuestro club y nos los entregaron con deuda”. 

Esa avanza de Riquelme no parece casual: perdura en agenda la discusión sobre las sociedades anónimas deportivas, las SAD, una propuesta que Mauricio Macri intenta extender a todo el fútbol argentina, pero con el hondo deseo de que se pueda aplicar en Boca Juniors.

“Nos da felicidad poder haber traído a todos estos jugadores después de haber presentado el superávit de la historia mas grande del club. Nos da felicidad porque demuestra que nuestro trabajo lo hacemos bien. Por más que después tenemos que escuchar la tele que comunica distinto”, concluye Román. “No ataco a nadie y no pasa nada. Vamos a intentar competir, claro que sí. Hemos ganado muchos títulos en estos años. El único equipo argentino finalista de la Copa Libertadores en los últimos no sé cuantos años”. (www.REALPOLITIK.com.ar)


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