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El Movimiento Popular Neuquino (MPN) atraviesa una de sus mayores crisis internas tras la histórica derrota electoral de 2023.
El Movimiento Popular Neuquino (MPN) atraviesa una de sus mayores crisis internas tras la histórica derrota electoral de 2023. La migración masiva de militantes y dirigentes al frente Neuquinizate, liderado por el actual gobernador Rolando Figueroa, deja al partido en una situación de inestabilidad y sin una estrategia clara de cara a las elecciones legislativas de octubre.
Mientras intendentes, exintendentes, concejales y dirigentes de peso dentro del MPN manifiestan abiertamente su apoyo a Figueroa, la Junta de Gobierno, encabezada por Omar Gutiérrez, mantiene un silencio absoluto que genera incertidumbre en la militancia. La falta de autocrítica por la derrota y la ausencia de un plan de acción han debilitado aún más la conducción partidaria.
El gobernador Figueroa, en tanto, refuerza su armado político con la vista puesta en el Congreso. En encuentros recientes en Chos Malal y San Martín de los Andes, recibió el respaldo de figuras clave como Mariano Gaido (Neuquén), Carlos Koopmann (Zapala) y Carlos Saloniti (San Martín de los Andes), quienes avalan su estrategia para que Neuquinizate gane representatividad en ambas cámaras legislativas.
En medio de este reacomodamiento del escenario político neuquino, la aparición pública del expresidente de la Convención del MPN, Jorge Sapag, en un acto junto a Figueroa y Gaido, es vista como un posible acercamiento a la actual gestión. Sin embargo, no hubo pronunciamientos sobre la crisis interna del partido.
El futuro del MPN es incierto. Mientras sus históricos dirigentes se debaten entre la lealtad a la estructura partidaria y la necesidad de adaptarse al nuevo liderazgo político de la provincia, la Junta de Gobierno deberá definir si sigue en la inacción o si busca una estrategia para recuperar terreno en el escenario político neuquino. (www.REALPOLITIK.com.ar)
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