Domingo 20.04.2025 | Whatsapp: (221) 5710138
17 de marzo de 2025 | Nacionales

Desorientado

Javier Milei pierde el rumbo: Se tambalean Luis Caputo, Patricia Bullrich y el “Mago”

El gobierno de Javier Milei, guiado más por la búsqueda de fama que por un rumbo claro, atraviesa una creciente crisis de gestión marcada por el desgaste de sus tres principales figuras -Luis Caputo, Patricia Bullrich y Santiago Caputo- y por la pérdida de su aura de outsider frente a los fracasos acumulados.

facebook sharing button Compartir
twitter sharing button Twittear
whatsapp sharing button Compartir
telegram sharing button Compartir
print sharing button Impresión
gmail sharing button Correo electrónico

Si algo ha demostrado el presidente Javier Milei en las últimas semanas es la desorientación. Hasta ahora venía comportándose como un monarca que confiaba las áreas clave de su gestión a expertos de comprobada trayectoria, más allá de cuáles fueran las orientaciones de sus gestiones. A Milei no le interesa imponer un determinado curso de acción, sino ver coronada su gestión con la fama y el éxito. Lo suyo es pasearse por la escena internacional, obtener fotos compartidas y alguna palmadita en el lomo de algún famoso, y tratar de convencer que en esos gestos se comprueba el reconocimiento de su tarea. De Donald Trump aún  no consiguió nada; Elon Musk no hizo una sola inversión en el país; el FMI dilata el cierre del acuerdo; y la nueva derecha europea, tras algunos guiños iniciales, ahora le da la espalda luego de su giro copernicano respecto de Volodímir Zelenski y el escándalo de la criptoestafa.

Los tres mosqueteros en los que descansa la gestión de Milei son Luis Caputo, Patricia Bullrich y Santiago Caputo. Respecto del primero, una vez concretada la victoria en el balotaje Milei tuvo que salir a buscar ministro de Economía urgente, ya que le quedó claro que ni la anunciada dolarización, ni la destrucción del Banco Central de la República Argentina, ni ninguna de sus transgresoras propuestas libertarias podrían ser implementadas. Entonces buscó a un experto en bicicleta financiera, dólar retrasado, destrucción del salario y de las asignaciones sociales, apropiación de los ahorros de los privados en moneda extranjera y endeudamiento irracional para confiarle la responsabilidad. Cada día queda más en claro que Milei y Caputo no coinciden en cuanto al plan económico: lo único que varió son los resultados que ya no respaldan a la gestión del ministro.

Para garantizar el orden y la acción represiva que necesariamente debía acompañar al “ajuste más grande de la historia” buscó a la especialista más calificada en pasar por alto las garantías constitucionales y los derechos civiles: nada menos que Patricia Bullrich, con quien mantuviera duros cruces durante la campaña electoral y a quien acusó reiteradamente de “terrorista” y “asesina de bebés”. Tal como en el caso de Luis Caputo, a quien se cansó de descalificar durante los años previos al balotaje, la exmontonera pasó a ocupar la cartera de Seguridad, la misma desde la cual comandó acción represivas y un constante torpedeo a la constitución cuando desempeñó el mismo cargo con Mauricio Macri. Mientras que las encuestas acompañaron su gestión, Milei sonrió satisfecho. Hoy, más allá de los gestos públicos de respaldo, en la Casa Rosada no dejan de mirar qué sucede en el hospital general de agudos José María Ramos Mejía con el desenlace clínico de Pablo Grillo, a sabiendas de que ningún presidente consiguió sobrevivir a una muerte producto de la represión estatal ilícita en nuestra democracia.

Juan Schiaretti observa el gélido saludo entre Patricia Bullrich y Javier Milei durante el debae electoral.

A Luis Caputo las cosas le van pésimo. No sólo no consigue cerrar con el FMI, sino que los especuladores del crawling peg le obligaron a reventar 474 millones de dólares sólo en el curso del viernes pasado para sostener la brecha ficticia del 15 por ciento entre el dólar oficial y el paralelo. Los principales bancos del exterior han publicado que, durante su gestión, ya se perdieron 42.000 millones de dólares para sostener la política de dólar barato y bicicleta financiera. Y ni qué  decir de las consecuencias del subsidio del turismo emisivo con los dólares del Banco Central, que en realidad no son tales, sino mayoritariamente los encajes de los ahorristas y blanqueadores privados. El gobierno está rematando los ahorros de los privados, y quienes venían apostando a la bicicleta lo saben y han comenzado a comprar dólares para cubrirse de la inevitable devaluación.

Queda, por último, Santiago Caputo, el único capaz de diseñar una hoja de ruta política para la gestión. Pero las acciones de Javier y Karina Milei, como en la estafa de $Libra, lo ponen en jaque constantemente, y ni qué decir de su interna con la hermana presidencial. El "Mago del Kremlin" está más débil que nunca, a punto tal que ha tenido que salir a dar la cara en la entrevista con Jonatan Viale y, unos días después, en el Congreso Nacional para confrontar con Facundo Manes, rompiendo así la regla sagrada de los monjes negros: no aparecer en público ni hacerse notar innecesariamente.

El problema de Milei es que, debido a sus múltiples desaciertos de las últimas semanas, ahora aparece “desangelado” y equiparado a la “casta”. En caso de que los fracasos de sus mosqueteros se confirme, no puede entregarlos sino reconocer el fracaso de su propia gestión. Y, para quien se ha presentado como un líder carismático “infalible”, cualquier decisión de este tipo será invariablemente asociada  con el ocaso de su gobierno.

Así lo planteo él mismo. Ahora, en caso de que la fortuna finalmente confirme su cambio de suerte, deberá asumir el costo de sus afirmaciones. (www.REALPOLITIK.com.ar)


¿Qué te parece esta nota?

COMENTÁ / VER COMENTARIOS

¡Escuchá Radio Realpolitik FM en vivo!