
Municipales
En la última semana antes de las elecciones en CABA, el oficialismo enfrentó tensiones internas, denuncias de militantes pagos y un súbito freno a su estrategia económica electoral, reflejo de una crisis política que pone en riesgo su desempeño en las urnas y agrava la disputa en La Libertad Avanza.
La última semana previa a las elecciones legislativas en la CABA transcurrió en un marco de cierta tranquilidad entre los competidores, aunque al interior del gobierno los fuegos de artificio no cesaron. La estrategia de anuncios preelectorales que debía difundir su candidato, Manuel Adorni, comenzó de acuerdo a lo programado pero, súbitamente, quedó interrumpida en su tercer y decisivo paso.
Así, tras difundir la quita de aranceles para celulares y tablets y la normativa antimigratoria, la frutilla del postre, las medidas económicas que inducirían a los ahorristas a gastar los “dólares que guardan en el colchón”, quedaron postergadas hasta después de los comicios. El propio candidato fue el encargado de informar, en su conferencia de prensa en su rol de vocero presidencial, que el aplazamiento apuntó a evitar acusaciones de “electoralista” por parte del kirchnerismo. ¿Por qué razón la estrategia del gobierno varió a último momento de manera tan drástica?
Una de las claves habrá que buscarla en el minúsculo cierre de campaña que realizó Adorni el miércoles pasado, que motivó denuncias de parte de los asistentes rentados, quienes aseguraron con capturas de pantalla como prueba que les habían ofrecido 25 mil pesos por asistir, de los que algunos sólo habían recibido 10 mil y otros directamente nada. La práctica de alquilar participantes ha sido característica de la “casta” desde tiempos inmemoriales, y los dedos acusadores señalaron como responsable a Sebastián Pareja, armador principal de Karina Milei en la provincia de Buenos Aires.
La novedad provocó un colapso interno: por un lado, porque el votante porteño medio castiga la corrupción en todas sus formas, por lo que la estafa $Libra ya afectaba sensiblemente el crédito de los candidatos del oficialismo nacional. Si a eso se le sumaba la denuncia de los militantes rentados y, finalmente, el anuncio que no tuvo lugar sobre desregulaciones en el uso de dólares “negros”, medida que viene muy floja de papeles y parece chocar, según los trascendidos, con las disposiciones vigentes a nivel nacional e internacional para combatir el lavado de activos, puede comprenderse la procrastinación decidida hasta después del comicio.
El argumento de Adorni de que la suspensión de los anuncios apostaba a “impedir que el kirchnerismo tenga la oportunidad de acusar de electoralista un paquete de medidas trascendentales para todos los ahorristas argentinos” no parece ser muy sólida, tratándose de un gobierno que no ha dudado al momento de llevarse puestas las normativas vigentes e, incluso, la propia constitución nacional, cada vez que afectaban a sus políticas y objetivos. La razón de fondo apunta, más bien, al eventual impacto sobre el voto de los porteños del próximo domingo, instancia en la que el gobierno nacional se juega demasiado.
Los ruidos internos dentro de La Libertad Avanza y del “Triángulo de Hierro” compuesto por Javier y Karina Milei y Santiago Caputo no intentaron ocultarse. La estrategia de la hermana presidencial, a cargo de la campaña nacional, consistente en armar listas propias en casi todas las provincias con la expectativa de consolidar una fuerza política nacional fracasó en todas partes, ya que los vencedores, en todos los casos, fueron los gobernadores y sus oficialismos, con la sola excepción de Chaco, donde LLA se incorporó a la lista de la gestión provincial en lugares aleatorios.
La denuncia de los militantes pagos en el acto de Adorni reavivó la siempre vigente disputa entre Karina Milei y Santiago Caputo, quien embistió a través de las redes sociales con una fina ironía: "Qué maravilloso es ver a la militancia genuina del presidente enarbolando sus estandartes".
Pero hubo más, ya que la ofensiva del "Mago del Kremlin" apuntó a desplazar a Pareja de su rol de armador principal en la provincia de Buenos Aires, para reemplazarlo por un actor propio: el diputado provincial Agustín Romo. Esto no sería sino un capítulo más de la disputa con la hermana presidencial, si el propio Javier Milei no hubiese retuiteado una publicación del santicaputismo que destacaba a Romo como el “conductor de LLA” en la provincia. No pasó desapercibido para nadie que el presidente tomara partido en contra de Karina, abrumado, tal vez, por los malos resultados electorales registrados hasta ahora.
Hasta el domingo por la noche podría esperarse una incómoda paz interna, pero, con los números electorales sobre la mesa, la interna se profundizará necesariamente. El gobierno precisa a toda costa imponerse sobre el Pro para tratar de absorber a todo el espacio de centro-derecha e imponer sus condiciones en los comicios bonaerenses. Pero, si esto no sucede, y el Pro lo supera, el castillo de naipes que se viene tratando de armar para presentar una lista unificada en la compulsa bonaerense puede caerse a pique. Sería muy difícil forzar al Pro a incorporar a sus miembros a una lista de LLA si no consiguió vencerlo claramente en la CABA.
Además, hay otro factor adicional. Si termina imponiéndose Leandro Santoro y LLA queda tercera, o no consigue superar con contundencia al partido amarillo, restaría saber la interpretación que hacen los mercados, siempre temerosos de las señales que anuncian una revitalización del cristinismo. ¿Podrá seguir avanzando el gobierno con la motosierra, llevándose todo por delante, con el aval de las fuerzas de centroderecha y de varios gobernadores, tras semejante demostración de debilidad política? ¿Qué pasaría con el dólar?
Finalmente, hay otro dato oscuro y de difícil lectura que enciende sospechas. ¿Por qué Javier Milei decidió estar fuera del país el trascendental domingo próximo? Si obtenía una victoria le convenía quedarse para solazarse en la celebración. Si perdía, para mostrar presencia y no desentenderse de la única elección de este año a la que le ha puesto el cuerpo en la campaña. ¿Es que tal vez los datos que maneja el gobierno no garantizan un domingo de gloria? (www.REALPOLITIK.com.ar)
ETIQUETAS DE ESTA NOTA
¿Qué te parece esta nota?
MÁS NOTICIAS