¿Un tiro por la culata?

El gobierno nacional celebró su reingreso en el mercado privado internacional de deudas como un hito de la gestión, tras colocar bonos para inversores del exterior a una tasa exorbitante del 29,5 por ciento. Sin embargo, las respuestas que recibió fueron francamente muy negativas. Lejos de convalidar la movida, los títulos y acciones argentinos cayeron en el plano nacional e internacional y la cotización del dólar creció hasta tocar los 1200 pesos.

La respuesta de Wall Street a la jugada de Luis Caputo fue la inversa a la esperada por las autoridades nacionales. Las acciones argentinas en la Bolsa de Wall Street registraron caídas superiores al 4 por ciento, con un alto nivel de volatilidad que, en algunos casos trepó al 4,7 por ciento. A excepción del dólar blue, que mantuvo su cotización por debajo del oficial, el resto de los valores presentaron valores muy negativos.

Los American Depositary Receipt (ADR) de empresas argentinas registraron su mayor caída entre los bancos: el BBVA (-4,76 por ciento), Banco Macro (-4,31), el Grupo Financiero Galicia (-4,01) y el Banco Supervielle (-3,13). Las energéticas cayeron un poco menos: Transportadora Gas del Sur (-3,75), Edenor (-3,0), Pampa Energía (-2,23), e YPF (-1,46). A las acciones argentinas no les fue mejor, ya que iniciaron la jornada con caídas en torno al 5 por ciento. Las únicas que experimentaron una leve alza fueron Tenaris (1,20 por ciento), Despegar (0,21) y Ternium (0,02).

En la City local, el índice Merval cayó (-1,09 por ciento), replicando el comportamiento de los ADR en Wall Street. El Macro (-3,8), Supervielle (-3,7), BBVA (-3,7), Metrogas (-3,4), Comercial del Plata (-3,3), Edenor (-2,4) y Grupo Financiero Galicia (-2,2).

Del mismo modo que en la Bolsa norteamericana, el Banco de Valores subió un 3,7 por ciento, Ternium un 1,4, Central Puerto 1,3, Aluar 1,2, IRSA 0,8 y Loma Negra 0,7.

Los bonos soberanos en dólares experimentaron una baja, aunque más acotada. Los Bonar (-0,8 por ciento) en el Bonar 2035, el Global 2046 (-0,7), el Global 2030 (-0,4) y el Bonar con vencimiento a cinco años (-0,5). El único que incrementó su cotización fue el Global 2035 (0,9).

A pesar de la reacción negativa de los mercados, el índice de riesgo país, del Banco de inversión JP Morgan, registró una caída de 11 puntos básicos (1,65 por ciento), ubicándose en 655 puntos básicos.

El impacto también afectó a la cotización del dólar en la plaza porteña. El tipo de cambio oficial escaló a 1132,06 pesos para la compra y 1180,84 para la venta, en tanto la cotización del Banco de la Nación Argentina los situó en 1145,00 y 1195 pesos respectivamente, con una suba de 1,70 por ciento.

El dólar blue, en tanto, se mantuvo sin cambios en 1150 y 1170 pesos, mientras que el MEP se incrementó 1,40 por ciento, situándose en 1180,58 pesos, y el CCL operó a 1189,06 pesos, con una suba de 1,20 por ciento.

De este modo, las respuestas a la colocación del nuevo bono argentino para inversores extranjeros provocaron una alta volatilidad en los mercados, con tendencias firmes a la baja de títulos y acciones nacionales. Según los expertos, la fabulosa tasa de interés ofrecida, 29,5 por ciento, es propia de países en situación de catástrofe, por lo que no fue una buena señal sobre la salud de la economía argentina. Resta esperar la evolución de estas variables, para confirmar si se ha tratado de un golpe genial o, simplemente, un tiro por la culata. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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