Es médico y estuvo detenido por antivacunas: “Advertir sobre sus efectos adversos me costó la cárcel"

“En los certificados yo aclaraba que las vacunas contenían elementos nocivos y que existían informes oficiales sobre efectos adversos graves, incluso la muerte. De acuerdo al Código Penal, si uno indica algo falso comete un delito grave, pero yo no mentí en absolutamente nada”, explicó Eduardo Yahbes. En ese sentido, remarcó que su accionar se ajustó a la Constitución Nacional, al Código Penal, al Código Civil y a las reglamentaciones del ministerio de Salud y la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT), motivo por el cual finalmente fue sobreseído.

El médico sostuvo que, pese a no haber violado ninguna norma, sufrió un fuerte perjuicio personal y profesional. “No tenían manera de condenarme porque todo lo que decía podía sostenerlo con informes oficiales, pero aun así me perjudicaron muchísimo”, afirmó. Según relató, el operativo incluyó un despliegue policial desmedido, allanamientos sin exhibición de órdenes judiciales y un trato que calificó como “prepotente e ilegal”.

Yahbes describió con crudeza su detención y traslado. “Nos encerraron en un camión celular en el día más bochornoso del año, sin darnos agua. Fue una situación límite, realmente traumática”, recordó. Además, denunció que el procedimiento incluyó filmaciones, simulaciones y maniobras que, a su entender, buscaban construir un relato mediático en su contra. “Era como ser el protagonista de una película armada”, ironizó.

El cierre de su consultorio durante 14 meses tuvo consecuencias devastadoras. “Tuve que malvender una propiedad y, cuando inicié el trámite, figuraba como fallecido en el Renaper. Había informes que decían ‘presunto fallecido’ y otros directamente ‘fallecido’”, relató. A esto se sumó el impacto en su entorno familiar: “Mi esposa terminó con una enfermedad grave como consecuencia de todo este hostigamiento”.

En el plano sanitario, Yahbes reiteró sus cuestionamientos a la campaña de vacunación contra el COVID-19 y a las políticas de revacunación. Aseguró que ya en diciembre de 2020 existían documentos internos que advertían sobre miles de efectos adversos, muertes, casos de miocarditis y abortos espontáneos, información que, según él, era conocida por los laboratorios y organismos reguladores. “Con una mínima parte de esos efectos se debería haber suspendido la experimentación, pero no solo no se suspendió, sino que se aplicó a toda la población”, sostuvo.

El médico también criticó que se intente responsabilizar a quienes se opusieron a la vacunación obligatoria por la caída en los índices de cobertura. “La gente no es estúpida. Muchas madres intuyen que algo no está bien y por eso deciden no vacunar”, señaló, y advirtió sobre el aumento de diagnósticos de autismo regresivo, que vinculó con determinadas vacunas del calendario obligatorio.

Finalmente, Yahbes cuestionó el rol de organismos internacionales como la Organización Mundial de la Salud y denunció que, pese a la gravedad de los hechos que describe, no existen sanciones ni juicios contra los responsables. “Lo que se hizo fue criminal y quieren seguir haciéndolo. Sin embargo, nadie paga las consecuencias”, concluyó. (www.REALPOLITIK.com.ar)