"Todo apunta a que Nasry Asfura es el nuevo presidente de Honduras"

Tras más de veinte días de escrutinio y con el 99,92 por ciento de las actas computadas, el escenario electoral en Honduras parece definido. Así lo sostuvo el asesor político Gustavo Esperanza en RADIO REALPOLITIK FM, al analizar el lento y controvertido proceso de recuento: “Hoy es el día número 23” y, aun con incidencias, “están hechas actas escrutadas el 99,92%”.

Según detalló Esperanza, el candidato del Partido Nacional, Nasry Asfura, encabeza el conteo con el 40,29 por ciento de los votos, mientras que su principal competidor, Salvador Nasralla, alcanza el 39,52. La diferencia ronda los 30 mil votos. “Aunque todo el 0,08 que falta escrutar fueran absolutamente todos de Nasralla, no alcanza para darlo vuelta”, explicó, remarcando que ya no se trata de una cuestión política sino “una cuestión matemática”.

En ese contexto, el analista fue categórico: “Todo apunta a que es el nuevo presidente de Honduras”. Incluso recordó que esa conclusión no es nueva: “Ya lo dije la primera vez que hablamos hace tres semanas atrás”. Desde el estudio, los conductores acompañaron la definición y saludaron “al próximo presidente de la Nación de Honduras”, dando por cerrado un debate que, para Esperanza, está artificialmente prolongado.

El asesor también defendió la transparencia del proceso electoral: “El proceso fue un proceso impecable”. En esa línea, destacó el rol de las autoridades electorales: “Las consejeras del Partido Nacional y del Partido Liberal hicieron una labor estupenda”, a pesar de haber sido “muy presionadas”. A su entender, la fiscalización fue correcta y el volumen de participación incluso favoreció al Partido Liberal, que “hacía 20 años que no tenía este caudal de votos”.

Sin embargo, Esperanza denunció una estrategia política posterior a la derrota: “Empezó a utilizar una estrategia de la mano del otro partido oficialista que ya había perdido” con el objetivo de “entorpecer la percepción de la gente sobre el proceso electoral” y “buscar presionar socialmente que se anule o que pierda legitimidad”. Según afirmó, esa maniobra apunta más a desgastar al ganador que a revertir el resultado.

Finalmente, el analista cerró con una definición que sintetiza el clima social tras casi un mes de espera: “Imagínate el estrés que tienen los hondureños que ya votaron hace 23 días atrás, que dicen: ‘Dame ya el resultado’”. Para Esperanza, la discusión está agotada y la definición es inminente: Honduras ya tiene presidente electo, y solo resta que el anuncio oficial confirme lo que “ya está claro”. (www.REALPOLITIK.com.ar)