Literatura

La cabeza de Ramírez (capítulo X)
El silbido del capitán de artilleros fue suficiente: las baterías comenzaron a tronar, destrozando la arboladura y parte del velamen de la goleta capitana. Desde estribor, respondieron con los disparos dos cañones: una de las baterías costeras fue totalmente destrozada y murieron sus tres artilleros.