
Legislativas
Sebastián Pareja, armador de La Libertad Avanza en Buenos Aires y hombre de confianza de Karina Milei, enfrenta denuncias por estafa, conflictos internos en su equipo y presuntos manejos irregulares que agravan su situación política.
La crisis interna en La Libertad Avanza (LLA) de la provincia de Buenos Aires sigue escalando con el foco puesto sobre Sebastián Pareja, el armador del espacio en la provincia de Buenos Aires y subsecretario de Integración Socio-Urbana de la Nación. A la serie de denuncias judiciales se suma ahora la falta de respaldo territorial.
Fabricio Martínez, coordinador general de Pareja en la tercera sección electoral, convocó recientemente a los coordinadores distritales en un intento por consolidar el apoyo público hacia el funcionario. La reunión buscaba también coordinar una respuesta al conflicto desatado por la denuncia de Daniel De Olivera, quien acusa a Pareja de apropiarse de 20 mil lotes y un pedido de indagatoria aún pendiente.
Sin embargo, el panorama se tornó crítico cuando seis de los coordinadores se negaron a respaldarlo. Uno de ellos, en estricto off the record, señaló: “Hacen la suya y después nos piden que salgamos a apoyarlo. Somos invitados de piedra en este desastre”.
Martínez, quien también arrastra un pasado controvertido como exbarrabrava de Laferrere, admitió estar trabajando para que De Olivera levante la denuncia. Sin embargo, Pareja lo habría conminado a resolver rápidamente el “despelote”, amenazando con que su lugar en el espacio se encuentra en juego.
La versión fue negada tajantemente por De Olivera, quien aseguró a REALPOLITIK haber recibido amenazas por parte deñ referente libertario: "Fabricio miente, me llamó dos o tres veces para apretarme, para decirme que soy un psicópata y un pelotudo y que nadie lo va a venir a forrear a él. Y que a Sebastián Pareja le chupa un huevo todo lo que yo haga", afirmó. Y agregó: "Fabricio es un cagón".
Fuentes judiciales apuntan al presidente del bloque de LLA en Florencio Varela, Diego Vallejos, como una figura clave en el entramado. Habría negociado la cesión de las tierras junto al senador Carlos Curestis, hombre de confianza de Pareja, con una recaudación estimada de 250 mil dólares. Las negociaciones, según señalan, habrían contado con la participación activa de Juanes Osaba, apoderado del espacio.
La denuncia presentada por De Olivera no solo se limita al ámbito bonaerense. El damnificado notificó a la embajada de Estados Unidos y solicitó la aplicación de la ley FISA, señalando posibles maniobras de lavado de dinero con vinculaciones internacionales. Además, acusó al presidente Javier Milei de encubrimiento por su inacción frente a los hechos.
Entre las medidas solicitadas, se incluyen la habilitación de la feria judicial, la retención de pasaportes y la citación urgente de Pareja y otros implicados, entre ellos, Karina Milei.
Hasta el momento, ni Pareja ni los otros acusados han emitido declaraciones públicas. Este mutismo, lejos de aquietar las aguas, solo incrementa las sospechas y la tensión dentro del espacio político. Mientras tanto, la posición de Pareja como armador en la provincia se encuentra en tela de juicio y la falta de respaldo de sus propios coordinadores complica aún más su futuro.
Con una investigación que promete profundizarse y una crisis interna que no da tregua, el caso de Sebastián Pareja podría marcar un antes y un después en la estructura de La Libertad Avanza bonaerense. (www.REALPOLITIK.com.ar)
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